¿De dónde viene la crisis del fentanilo? ¿Llegará la epidemia a Europa? En otro vídeo presentábamos esta sustancia tan peligrosa, y en este toca ponerla en contexto global.
Si bien el fentanilo ha cobrado notoriedad recientemente, en Norteamérica lleva años siendo una epidemia devastadora. El año pasado, más de 880.000 personas fallecieron por sobredosis de esta droga en esa región. Afortunadamente, la situación en Europa y Sudamérica es distinta, y no hay motivos para creer que se repita la misma tragedia.
La historia de la epidemia de fentanilo en Norteamérica es singular y compleja. Comenzó con la codicia de algunas farmacéuticas que presionaron por la sobreprescripción de opioides potentes, como la oxicodona. Esto, sumado a diversos problemas sociales, desencadenó una adicción masiva a nivel poblacional. Al restringir el acceso a estos fármacos, los usuarios recurrieron a la heroína, la droga más similar que encontraron.
A este problema se unió la codicia de los cárteles que importaban y distribuían estas drogas en Norteamérica. Empezaron a adulterar la heroína con fentanilo porque, a pesar de ser mucho más peligroso de dosificar, era más rentable, transportable y fácil de importar.
Así se gestó la epidemia actual, que lleva años agravándose en Norteamérica.
Por el momento, esta historia no se ha repetido en Europa ni en Sudamérica, y esperamos que así siga. Sin embargo, la reciente erradicación del cultivo de opio en Afganistán por parte de los talibanes podría generar una escasez de heroína en Europa, lo que plantearía un escenario muy peligroso.
El consumo de cualquier droga legal o ilegal es una actividad de riesgo y está totalmente desaconsejado, pero si decidieses hacerlo: infórmate bien sobre la sustancia, su duración, sus efectos o su dosificación y analiza en servicios de reducción de riesgos como el de Energy Control (España), Kosmicare (Portugal) o Échele Cabeza (Colombia).
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