Contestamos a la pregunta «Efectos negativos del cannabis» en el podcast Carne Cruda T10X71.
Transcripción:
Antes de que llegaras, Dano nos estaba contando que él usa el cannabis para la ansiedad, y hay mucha gente que también lo usa para estados depresivos. ¿Puede tener efectos negativos entonces?
Sí, ciertamente puede tener efectos negativos. Es verdad que muchas personas encuentran alivio, generalmente a corto plazo, en la ansiedad cuando consumen cannabis, especialmente variedades con mayores cantidades de CBD en lugar de THC, ya que tienden a ser más narcóticas y relajantes. Las variedades con mucho THC son más psicodélicas y pueden generar ansiedad. Sin embargo, cuando el consumo se cronifica y la dosis aumenta, el cannabis puede pasar de ser ansiolítico a ser ansiógeno. Esto ocurre especialmente en consumidores habituales.
También hay que tener en cuenta las características personales. Algunas personas encuentran que el cannabis les sienta bien y les alivia, mientras que otras se sienten mal desde la primera calada. No podemos asegurar que siempre se dará esta transición de ansiolítico a ansiógeno, pero muchas personas han experimentado que, después de un uso prolongado, el cannabis deja de tener el efecto deseado.
Si hiciéramos una encuesta, el motivo número uno por el cual los consumidores habituales de cannabis dejan de consumir es porque pasa de quitarles la ansiedad a generarles ansiedad. Es increíble cómo puede cambiar de un día para otro.
Dano: Sí, me ha pasado con la marihuana. He sido un consumidor de hachís durante toda mi vida en lugar de marihuana. En cada porro de hachís que me hago hay tabaco, pero no fumo tabaco solo. Mi consumo de nicotina es menor, pero aun así tengo una adicción a la nicotina. El hachís tiene más CBD y su efecto es más físico, mientras que la marihuana es más esporádica y puntual. Hubo un momento en el que la marihuana empezó a darme ansiedad en lugar de quitármela, y decidí dejar de consumirla.
Las drogas tienen efectos muy diferentes cuando se utilizan de forma esporádica con una orientación más recreativa o exploratoria, en comparación con su uso diario, que se convierte en parte de la rutina. El consumo recurrente y diario tiende a ser más problemático en general, y los efectos negativos aumentan. El uso terapéutico y el uso recreativo adecuadamente estructurado y planeado pueden ser beneficiosos, pero el uso crónico tiende a invertir este balance, resultando en más riesgos que beneficios.
El consumo de cualquier droga legal o ilegal es una actividad de riesgo y está totalmente desaconsejado, pero si decidieses hacerlo: infórmate bien sobre la sustancia, su duración, sus efectos o su dosificación y analiza en servicios de reducción de riesgos como el de Energy Control (España), Kosmicare (Portugal) o Échele Cabeza (Colombia).
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