Efectos en el sistema nervioso central: La nicotina actúa como un estimulante suave, mientras que el LSD altera profundamente la percepción y la cognición sin afectar directamente los sistemas cardiovasculares de manera significativa. No hay una interacción química peligrosa conocida entre estas sustancias.
Impacto psicológico: La nicotina podría reducir ligeramente la ansiedad durante un “viaje” de LSD para algunas personas, pero también podría intensificar sensaciones desagradables en caso de un mal viaje, como inquietud o paranoia.
Potencial de uso compulsivo: Durante el uso de LSD, las personas pueden fumar más de lo habitual debido a la desinhibición o el deseo de manejar la energía del viaje. Esto puede aumentar los riesgos asociados con el tabaquismo prolongado.
Riesgos indirectos: Si el entorno no es seguro (por ejemplo, un lugar con poca ventilación o materiales inflamables), el uso de nicotina durante un viaje de LSD puede aumentar el riesgo de accidentes debido a la falta de coordinación o atención.